EUROPE WAKEUP - DESPIERTA EUROPA

EUROPE WAKEUP, DESPIERTA EUROPA,  ha sido el mensaje que este 7 de diciembre han llevado la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Omnium Culltural a la Unión Europea en Bruselas. Ha sido una demostración de fuerza ejercida en la Capital de la UE para exigir que se tomen acciones tendentes a resolver el conflicto entre Cataluña y España, un país sometido a un Gobierno totalitario y abusivo que emplea la justicia obediente para arrollar a sus adversarios políticos. 

Casualmente en estos momentos los Presidentes de Omnium Culltural y de la ANC, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, siguen encarcelados en una prisión cercana a Madrid. En otra prisión madrileña están presos el Vicepresident de Catalunya, Oriol Junqueras, y el Conseller de Interior, Joaquim Forn.


A la cita en Bruselas acudieron alrededor de cuarenta y cinco mil (45.000) catalanes independentistas, según cálculos de la Policía de Bélgica, lo cual constituye una asistencia mayúscula tomando en consideración que se trata de 2.800 km de ida y vuelta, lo que significaba agregar al costo del viaje los de alimentación y pernoctación que pocos pueden afrontar en estos tiempos. Una parte de los viajeros lo hicieron en trenes y aviones, otros en autobuses con coordinación de la ANC, congestionando las carreteras de Francia entre Perpiñán, París y Bruselas.

Los costos, que son afrontados por cada viajero, variaban según el medio de transporte y costo del hotel, una facilidad que ha presentado ciertas dificultades porque Bruselas no dispone de suficiente alojamiento turístico para tantos visitantes en un momento inesperado. Por fortuna muchos hogares belgas nos habían ofrecido sus casas sin costo para recibir catalanes independentistas en las noches del 6 y 7 de diciembre, lo que ayudó a reducir las dificultades. 

El día anterior el Estado Español envió con gastos pagados algunos autobuses llenos de voluntarios unionistas contratados que, sumados a los empleados y personal del Servicio Exterior en Bruselas, sumaron cerca de 500 voceadores que ondeaban banderas al grito de "Respeto a la Constitución" y "Abajo Cataluña y Viva España". En Bruselas no lucieron sus muy queridos emblemas nazis ni de Falange, no destrozaron mobiliario urbano ni hirieron viandantes como acostumbran en Barcelona y Valencia, conscientes de que en Bélgica no disfrutaban de la complicidad policial.
 

La  noche previa al día 7, muchos catalanes llenaron la Grand Place cantando "Els Segadors" y bebiendo cava. Por cierto, algunos comerciantes locales que se habían provisto de cava catalán hicieron buenas ventas con los independentistas que brindaban por el futuro. En cambio los gorros y bufandas amarillas se agotaron en las tiendas en menos de una hora ¿Quién hubiese imaginado que ese color tendría tal demanda en la noche del 6 de Diciembre si lo normal para la época son el rojo y verde? 

El recorrido inicialmente señalado para la manifestación tuvo que ser modificado ante la  asistencia tan numerosa que había colapsado el centro de Bruselas. La ruta definitiva resultó más amplia en todo su recorrido, empezando en la Av des Casernes para dirigirse a Ixelles, de allí a la rue DucMide hasta llegar a Molenbeck Sant Jean donde estaba instalada la tarima de oradores. En total, un recorrido de  4 Km.

La manifestación marchó se inició con algunas fallas de coordinación a causa de los cambios de última hora, pero nada paró su recorrido tremolando banderas y cantos bajo los aplausos de los belgas en sus balcones. A las  3:15 la marcha alcanzó el final y diversos oradores expusieron el conflicto político y social de Cataluña política en España.

Quienes intervinieron el el podio?
Los que se esperaba: ambos Presidentes, Puigdemont y Mass, Marta Rovira, los Consellers en el exilio y los Vicepresidentes de Ominum y la ANC. Intervinieron miembros de Esquerra Republicana, de JxCat y la CUP, así como sus representantes ante la Asamblea Europea, en una demostración evidente de la transversalidad del independentismo catalán, todos unidos para defender la democracia que debería regir Europa. También participaron algunos euro parlamentarios, catalanes, alguno español y unos pocos europeos, entre los que destacaron el esloveno, la representante de Gales y una dama de Estonia, asegurando que unirán sus voces a las nuestras en el concierto europeo.  

¿Qué dijeron los oradores? Más o menos los mismos argumentos que han llevado los dirigentes políticos y sociales catalanes a las cárceles españolas:

* Que España es un Gobierno totalitario disfrazado de democracia.
*Expusieron la reculada de la justicia española ante la negativa segura de la justicia belga a calificar como delito contra el Estado las acciones políticas del President y Gobierno de Cataluña.
*Varios oradores pidieron a las autoridades europeas que intercedan ante el Gobierno de España para que actúe conforme a normas democráticas, detenga su manipulación de la justicia y se siente con Cataluña para buscar medios de entendimiento.
*La Consellera de Educación, Clara Ponsatí, y varios expositores llamaron la atención hacia una realidad vergonzosa: en la Unión Europea hay políticos exiliados y presos políticos que además son maltratados y mezclados con criminales comunes.
* Más de un orador criticó que la Unión Europea esté colaborando con las desmesuras y procedimientos de fuerza del Gobierno español. 
* Carles Puigdemont le recordó al Organismo continental que además de respaldar a los Gobiernos, Europa está obligada a escuchar a sus ciudadanos. Si las personas no son importantes para la Unión Europea, la democracia desaparece. 

El President terminó su intervención afirmando que un pueblo capaz de movilizarse a tanta distancia para reclamar democracia y libertad, constituye la mejor cara de Europa.

Mientras tanto en Madrid, la Vicepresidenta Sáez de Santamaría se refería con desprecio a la manifestación de Bruselas, mofándose de las cifras indicadas por la Policía de Bélgica y señalando que no todos los manifestantes eran catalanes. A ello agregó que el próximo gobierno de Cataluña sería de derechas y el conflicto quedaría resuelto. 

Bonberos catalanes haciendo cola ante la Cruz Roja en
Bruselas para donar sangre.

Era lo esperado de un Gobierno empeñado en mirar hacia otro lado para no admitir la realidad, igual que era de esperar que  García Albiol calificase los eventos de Bruselas como esperpénticos. Bien visto, el esperpento es que un personaje anclado en el Siglo XIX y estrambótico en su esencia y palabra, pueda representar a un partido político en Europa.     

Otro aspecto interesante del día fue protagonizado por los bomberos y trabajadores de la salud de Cataluña, que hicieron acto de presencia masiva con fines complementarios. Ambos cuerpos brindarían su apoyo en cualquier eventualidad y además diseñaron un plan para agradecer a Bruselas, en nombre de Cataluña, el afecto recibido por el President y Conssellers durante su exilio. De ese agradecimiento dejarían testimonio los bomberos después de concluir los actos, dirigiéndose en masa a la Cruz Roja para donar sangre a Bélgica. 

Motivados por el espíritu humanitario de los bomberos, varias docenas de voluntarios se sumaron a ellos en la Cruz Roja mientras el grueso de los asistentes al evento que pernoctarían en Bruselas, se encargaron de la limpieza de parques y calles por donde había transcurrido la manifestación. Debemos señalar el esmero que esa gente  dedicó a la limpieza, evitando así que nos confundieran con los unionistas españoles que había pasado por Bruselas el día anterior dejando testimonio de su presencia por donde iban pasando.

¿Qué consecuencias podría traer esta movilización a Bruselas? 

Conociendo la mentalidad de las actuales autoridades del Parlamento  Europeo no debemos esperar reacciones favorables de inmediato. El Presidente Jean Claude Juncker es el protagonista del sistema diseñado para defraudar impuestos a los países europeos en favor de Luxemburgo. Es Presidente del Parlamento Europeo porque a los Gobiernos de la Unión les interesa esa clase de gente, siempre dispuesta a favorecer a sus amos. Por su parte, Donald Tusk, Presidente del Consejo Europeo, debería estar interesado en los aspectos morales fundacionales de la UE, pero no se atrevería a enfrentarse a los halcones. En conclusión, deberemos esperar a que cambien las autoridades europeas antes de esperar resultados a favor de las minorías de las que Cataluña forma parte.