Tras
analizar el propósito y funcionamiento de las Cortes Españolas, he llegado a la
conclusión de que estamos gastando inmensos recursos y tiempo en un proceso
permanente que podría ser automatizado. Esta es mi propuesta que ofrezco como
mi contribución personal a la mejoría de las labores legislativas.
CONSIDERACIONES:- Ambas Cámaras, Diputados y Senadores, están constituidas por hombres y mujeres votados en listas cerradas conforme a su fidelidad con cada partido político, sin importar origen, virtudes ni historial criminal. Ello nos permite deducir que su identidad personal, capacidad analítica, fidelidad a los votantes e intereses regionales son aspectos irrelevantes.
- Ha sido demostrado hasta la saciedad que los Diputados y Senadores, cada cual en su respectivo partido, votan al unísono según el mandato del Jefe Político. Sus criterios personales, si acaso existen, constituyen defectos que mantienen a buen recaudo.
- Cuando un representante vota contra el mandato del Jefe, como hiciera recientemente Sorayita, damos por sentado que ha pulsado el botón equivocado, lo que conlleva una sanción económica para castigar su estupidez.
- Además de
apretar botones para consignar votos, los representantes están obligados a
aplaudir cada intervención de su bancada, a más insulsas las palabras, más entusiastas
los aplausos. Sin importar que el
orador suelte una mentira más grande que la catedral de Toledo, sus compañeros
diputados deberán aplaudirle hasta convencer a sus oponentes.
- La función de apretar botones es una tarea que podría reducirse a un solo botón, el del Jefe respectivo, y luego multiplicado por el número de parlamentarios que maneja son derecho a chistar.
- Los
representantes, tanto aquellos que viven en Madrid como los de provincia,
se ven obligados a la muy penosa obligación de asistir a las sesiones de
Cámaras hasta en épocas de lluvia e Invierno. Para compensarles tantos
sacrificios reciben pagas extras, asignaciones para viajes y permanencia
en hoteles de Madrid, reembolso
- Ambas
Cámaras funcionan en espacios cerrados, protegidos contra las inclemencias
del clima, lo que permitiría emplear equipos electromecánicos sencillos
para labores de votación.
RECOMENDACION
Vistas las circunstancias, creo que podríamos evitar muchos traumas a ese sufrido sector de nuestra sociedad, los llamados miembros del Poder Legislativo. Podríamos sustituirles por muñecos que muestren sus caras, cada muñeco en su butaca con la identidad de su partido y número correspondiente para evitar
confusiones de personalidad. Ninguno tendría voz, con lo que evitaríamos las tonterías y mentiras
que se escuchan a diario en ambas Cámaras. Tampoco
dispondrían del sentido auditivo, una característica inútil en la actualidad porque nadie escucha lo dicho por otros miembros de
la Cámara. En cambio todos los muñecos estarían dotados de brazos mecánicos y manos para aplaudir
ruidosamente las intervenciones, actitud indispensable en el comportamiento de los Diputados y Senadores que se respeten y aspiren a repetir.
En
las ilustraciones que se muestran podemos ver ejemplos de parlamentarios mecanizados. Se incluyen ejemplos para ambos sexos. Los chicos con trajes de
color serio, como debe ser y las chicas luciendo modelitos de época. En las
ilustraciones el diputado viste un traje azul medianoche con la corbata de su
partido y la diputada una blusa tropical, como las que hemos visto
recientemente en las colecciones para el próximo verano.
La
representación parlamentaria automatizada ofrecería múltiples ventajas
financieras y logísticas. Es evidente que las Cámaras resultarían más baratas
de operar. Los sacrificados parlamentarios se librarían de la obligación de asistir
a tantas reuniones y viajes. Podrían permanecer en sus pueblos sin molestarse
por viajar a Madrid porque el muñeco ocuparía sus sillones 24 horas al día. Estos suplentes permanentes demostrarían una capacidad de raciocinio equivalente a sus representados y jamás se equivocaría al votar. Por si eso no bastara, tampoco dirían idioteces a las que nadie hace caso.
Las
diputadas disfrutarían de ventajas adicionales: ahorrarían el costo de
peluquería y maquillaje y evitarían las murmuraciones malintencionadas cuando
repitiesen el mismo vestida más de dos veces en el mes. Además los muñecos
podrían mostrar atractivos físicos especiales sin tener que pasar por el
quirófano. Veríamos a Luisa Yoquesé con las tetas cual melones de 2 kilos o María Talporcual con la nariz suavizada y sin
las gafas culo de botella que tantas burlas le han costado. Más aún, con el
paso de las estaciones, los muñecos cambiarían de vestido según el modisto del momento.
ADVERTENCIA:
Esta
contribución es para beneficio exclusivo de las Cortes de Madrid. Aquellos Parlamentos
regionales que deseen aprovechar las ventajas de este sistema (propiedad
registrada) deberán ponerse en contacto con el suscrito para ajustar precios y
condiciones.
