viernes, 26 de octubre de 2012

UN PROCESO SOBERANISTA IMPARABLE

Nadie podía imaginarse en la noche del 10 de Septiembre, lo que se estaba cocinando en los hogares catalanes. En todos ellos hombres y mujeres estaban haciendo arreglos para salir a la calle al día siguiente al grito de INDEPENDENCIA. Y salieron. Más de UN MILLON Y MEDIO de personas ocuparon las calles y avenidas de Barcelona portando banderas para exigir el cese de la tiranía que a lo largo de tres siglos, con altibajos, ha mantenido secuestrados los principios democráticos de Cataluña.


Que nadie olvide que Cataluña constituyó la PRIMERA DEMOCRCIA del continente europeo cuando el oscurantismo de la Edad Media era la forma de gobierno establecida. Fue ésta una de las razones poderosas que impulsaron a los Reyes absolutistas de Castilla para invadir Cataluña y arrasar el Consell de Cent que regía y garantizaba la vida y derechos de los ciudadanos libres de esta región, especialmente de Barcelona. No podían tolerar que al borde su reino existieran un conjunto de condados independientes en cuyos dominios los ciudadanos eran libres.

Los catalanes no lo hemos olvidado jamás, ni por un momento, y cada día a los largo de tres siglos hemos ratificado con decisión pero sin hacer ruido, el propósito de devolver nuestra patria a su condición original de estado soberano. Los grupos humanos que más recientemente se han expresado en este sentido no han sido los partidos políticos sino los industriales de la mediana y pequeña empresa, PIME. Su Directiva  ha evaluado el sentimiento político de este sector entre 2200 empresarios asociados y los resultados han sido inesperados:

66,8 % Apoyan la Independencia, un porcentaje que crece día a día.
81,5 % Consideran que sus empresas seguirían siendo viables después de la separación del estado Español.
82,4 % Quieren que se realice la consulta por la independencia.
17,6 % Rechazan la separación de España o se negaron a responder.

Preguntados acerca de un posible boicot por parte de España a los productos industriales catalanes, sus respuestas fueron:

16,9 % Sin preocupación.
44,3 % Levemente preocupados.
25,1 % Preocupados con reservas.
13,7 % Muy preocupados.

Por estas mismas fechas se ha realizado una consulta entre los Colegios Profesionales para determinar sus preferencias políticas.  Hasta la fecha 40 de estos colectivos han respondido sumándose  al sentir catalanista mediante nota de prensa, entre ellos los gremios de Administradores, Médicos, Farmaceuticos, Ingenieros Industriales, Aparejadores, Escritores, Transportistas...

Como podemos ver, no es ARTUR MAS, Presidente de la Generalitat, el impulsor de este movimiento. En realidad CIU siempre fue partidario de una España confederada. MAS no ha hecho más que aceptar el rol que le tocaba como máxima autoridad de Cataluña y disolver un Parlamento que había sido elegido bajo un proyecto de tipo fiscal únicamente. Madrid hace muy mal en apuntar los tiros hacia MAS porque los protagonistas son otros: el PUEBLO CATALAN y la ASAMBLEA NACIONAL CATALANA, coordinada por Carme Forcadell, una periodista de aspecto frágil y mirada maternal.

Madrid haría bien en dejar de proferir amenazas y quedar en ridículo ante la Unión Europea. Su violencia verbal podría inducir a cualquier exaltado hacia actos bélicos de alcance insospechado. El que esto escribe,  no puede imaginarse a una División de valerosos soldados españoles mandados desde Madrid a Cataluña para arrasar pueblos y ciudades, al viejo estilo de sus antecesores aunque, tratándose de la Capital del Reino, cualquier cosa podríamos esperar.





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