LA CULPA NO ES DEL CIEGO...

Pocos días atrás la Sexta-TV transmitió algunas entrevistas realizadas en la calle del Madrid de los señoritos, a transeúntes que se confesaban seguidores del Partido Popular. Todos ellos afirmaron que a pesar de los repetidos escándalos que afectan la moralidad de ese partido, le darán sus votos nuevamente este año. Esa actitud justifica que el PP siga contando con 20% de proyección de votos en 2015 y me recordó el sabio refrán que dice: 

"La culpa no es del ciego, 

es del que le dio el garrote".

Resulta comprensible que algunos votantes de España, ajenos a la afición que domina a los Dirigentes del PP para ejercer extorsión y robo de dineros públicos, votasen por ese partido en las últimas elecciones. Pero que buena parte de esos mismos votantes sigan siendo fieles a esa banda de sinvergüenzas, resulta incomprensible a primera vista. Esa actitud merece un análisis de motivación e intenciones.

Científica y estadísticamente demostrado, sabemos que los votantes del PP se dividen en cinco órdenes:

1.- Monárquicos de vieja data que ven en el Partido Popular una garantía de continuidad de la tradición absolutista Borbónica: "Nosotros felices y la gente que se joda".

2.-El segundo grupo está formado por los viejos franquistas, falangistas y herederos de ambos, cuya condición social y bienes provienen de los privilegios y el robo ejercidos durante la Dictadura. 

3.- En este grupo están los familiares y amigos de los altos y medios Dirigentes del PP, los que invariablemente obtienen beneficios económicos cuando el partido manda en su pueblo.

4.- Gente común que  votó equivocadamente por el PP. Personas que se confiaron en sus mentiras y, defraudados por el desgobierno del PSOE, quisieron castigarle y se tiraron por un puente. 

5.- Finalmente tenemos a los imbéciles e irresponsables sociales que votaron por PP. Se trata de aquellos que asisten a los centros de votación por falta de ocupación en domingo y votan por la primera papeleta que les queda a mano.

Los 3 primeros grupos representan por sí mismos un 50% de los voto del PP y no cambiarán aunque Mariano salga fotografiado degollando a un niño para robarle el bocadillo. Esa gente lo excusará de mil maneras para poder aquietar su miserable conciencia. Nada de lo que puedan hacer los Dirigentes del PP, incluyendo al Presidente Aznar y su estúpida consorte Botella, haría cambiar de idea a sus seguidores porque su fidelidad solamente obedece a su propia inmoralidad.

La mayoría de los fieles seguidores del PP, son hijos o nietos de sinvergüenzas, de aquellos criminales que actuaron durante 40 años con licencia para hacer a su antojo. Son los descendientes de los que pegaban tiros en la nuca a la orilla del camino, de los que se apropiaban de las propiedades y los hijos de sus víctimas y cantaban el "Cara al Sol" como si el astro fuera de su propiedad. Son los mismos que hoy gritan en la Puerta del Sol pidiendo justicia para los 860 víctimas de ETA, pero no admiten ni un recuerdo para los más de 200.000 asesinatos del franquismo después de la guerra, ni permiten la búsqueda de sus restos. Los votantes del PP son aquellos que aplauden cuando ese partido dice que los descendientes de las víctimas mortales de Franco solo recuerdan a sus deudos para pedir alguna compensación económica.

¿Alguien puede pensar que los votos de esa chusma cambiará este año? IMPOSIBLE. Para que votasen por España sería necesario vaciarles la mollera y rellenar su calavera con un tratado de historia verdadera y democracia. En esa gente, en Gallardón y Aznar, Hernando, Margallo y González Pons, Correa, Blesa y Martínez Pujalte, Barcenas y Alonso, y en otros como ellos, sigue vivo y mandando el franquismo en España y el recuerdo frustrado del nacional-socialismo alemán. Si Hitler hubiera ganado la Guerra, piensan con trsteza, hoy serían dueños del mundo y no unos simples ladronzuelos de un país decadente. 
Y sus votantes, son las sombras de aquella soldadesca que entraban triunfante a los pueblos repartiéndose las chicas que usarían esa noche, después de meterle un tiro al padre o hermano que pretendiera discutirles el derecho.

Eso son los votantes del PP, la gentuza que le ha dado el mando al club de ladrones y saqueadores que ha estado gobernando en España. A su muerte, quiera el Demonio llevárselos y ponerlos a hervir en aceite por los siglos de los siglos, para que purguen todo el daño que le han causado a su patria.